martes, 11 de octubre de 2011

El juego



Lo acaban de perder.

Ayer hablaba con la queridísima señorita Marina D'aquino, y como siempre, perdí. Cada vez que siquiera la oigo nombrar, pierdo. Y encima ahora se le da por saludarme diciéndome "perdiste". Bueno, ahora perdieron todos ustedes. Pero porque los quiero!

Prosigo. Ayer tuve un raye de violencia dentro de mi cerebro y pensé en varias formas de matarla. Una muerte horrenda, en lo posible. Pero eso en este país de mierda es ilegal. Y dicen que estamos en democracia, dah. La libertad no existe.

Bueno, por esta clase de problemas legales que rondan el asesinato, tuve que conformarme con dibujar lo que planeaba -cómo, tampoco puedo PLANEAR un asesinato? la puta madre, todo culpa de este porongo gobierno- ...bueno, imaginaaaaba que podía hacer. OK, podría, podría. Arrgh... mi abogada me tiene como loco por acá.

Hablé con la Bere, antes de empezar con el coloreado, y me dijo que no se notaba quién era la dibujada. Y me propuso agregarle algo distintivo de ella, como un ancla, para representar lo naval. Bueno, eso mismo hice. A mi modo. Amo las muertes irónicas.





Por cierto, Mari, deberías saber que esto es en joda y con cariño... Ya tuve suficientes problemas con la cana en estos últimos... años.

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